De acuerdo a una denuncia que radicó el padre de un alumno de 13 años en la comisaría octava de La Plata, un compañero fue armado a la escuela, le sacó su teléfono celular y lo amenazó delante de todo el mundo.
El hecho, siempre a decir de esa presentación, tuvo lugar en la puerta de la Técnica Nº 5 de Villa Elvira, situada en la calle 76 entre 7 y 8, a pocos metros de la emblemática Unidad Penal Nº 9 de nuestra ciudad.
Todo habría pasado cerca de la una de la tarde de ayer, en la mismísima puerta de ese establecimiento educativo.
El hombre contó que su hijo le prestó el teléfono celular iPhone 8 a un compañero para que se saque un par de fotos con un amigo, pero lejos de devolvérselo, se alejó caminando del colegio en compañía del otro joven, del que no se informó si también asiste a la institución.
Por eso, el adolescente corrió para que se lo devolviera y ahí fue cuando, en base a la exposición oficial, el otro estudiante se levantó un buzo y dejó ver un arma de fuego que llevaba en la cintura. “Qué vas a hacer”, fue la frase intimidatoria que le espetó, para decididamente alejarse de la zona sin acudir a clases.
Demás está decir que ese chico está identificado y tendría antecedentes por otros episodios graves.
Incluso, el denunciante contó que el amigo del alumno armado le habría quitado una gorra a su hijo, con la que fugaron ambos en dirección al Barrio UPCN.
Desesperado, el adolescente esperó que abrieran las puertas de la escuela para contarle lo que le había pasado.
Impuesta de lo acontecido, la docente llamó al padre del alumno y se confeccionó un acta administrativa, con los detalles del suceso.
En ese documento, trascendió, se dejó constancia que hubo un intento de contacto telefónico con los progenitores del acusado, aunque nadie respondió.
Por eso, pudo saber este diario que se decidió pedir la intervención policial, ya que en otras ocasiones el mismo compañero le sacó una campera.
En la escuela se hizo un acta y trataron de hablar con la familia del agresor. No hubo respuesta
Como se sabe, los actos de hostigamiento escolar son moneda corriente y deberían captar toda la atención de las autoridades.
Son manifestaciones conocidas como bullying, que incluyen cualquier forma de maltrato psicológico, verbal, físico o social, producido entre estudiantes de forma reiterada, tanto en el aula, como a través de las redes sociales.
En la faz investigativa, cabe destacar que ahora se analizarán las cámaras de seguridad del barrio y seguramente, con las precauciones del caso, ya que se trata de menores de edad, se intentará relevar eventuales testigos del hecho.
En la causa tomó conocimiento la UFI en turno, aunque, atendiendo la edad del sospechoso, al margen de que sería inimputable para la ley, seguramente habrá un corrimiento al Fuero de Responsabilidad Juvenil y/o algún juzgado de Familia.
No es la primera vez que en La Plata sucede un evento de estas características, lo que enciende definitivamente todas las alarmas.