Arrancó ayer el juicio oral contra la llamada “megabanda” o “banda del juez”, con el ex titular del Juzgado de Garantías N° 2 de La Plata, César Melazo, en el banquillo de los acusados. No está solo: lo acompañan otras once personas imputadas de gravísimos delitos, quienes escucharon
de boca de los fiscales Mariano Sibuet y María Victoria Huergo los cargos que se les endilgan.
"Al menos desde el año 2004 y hasta el momento de sus detenciones en la presente causa, en principio diez sujetos de sexo masculino, en la ciudad de La Plata y alrededores, tomaron parte de modo permanente y con voluntad de integrar una asociación destinada a cometer reiterados hechos ilícitos de distinta naturaleza, robos bajo la modalidad de escruche, robo de autos, su posterior reducción, adulteración y venta, comercialización de estupefacientes, con un mismo modus operandi, con división y organización de tareas: algunos de ellos en su condición de efectivos policiales aseguraban la zona, entregaban los trabajos y brindaban cobertura policial, otro de ellos en su condición de magistrado, cargo que ocupó hasta mediados del año 2017, intervenía a los fines de procurar su impunidad, mientras que los restantes conformaban grupos o parejas de trabajo que llevaban a cabo los hechos ilícitos”, sostuvieron los representantes del ministerio público.
Se trataría, a entender de la acusación, de una supuesta asociación ilícita, figura que establece una pena de entre tres y 10 años de prisión o reclusión y para el jefe u organizador, un mínimo de cinco.
En ese rol, los fiscales ubicaron a Melazo junto al ex comisario Gustavo Abraham Bursztyn, mientras que como aparentes coautores estarían el ex policía Gustavo Andrés Gregorio Mena; Adrián Oscar Manes, alias “Quichua o Kichua”; Javier Maximiliano Ronco; Ángel Custodio Yalet, alias “Pipi”; Carlos Aníbal Barroso Luna, alias “el Macha”; Juan Roberto Farías, alias “Tecla” (asesinado); Carlos Jorge Bertoni, hermano del ex campeón mundial de fútbol del ´78; Enrique Edgardo Petrullo, alias “Quique”; Martín Ezequiel Fernández, alias “Gaucho” y Rubén Orlando Herrera, alias “El Tucumano”, quien quedó afuera de este proceso, porque ya pactó su responsabilidad y pena en un acuerdo abreviado.
Según la investigación que encabezó la fiscal Betina Lacki, la división de roles indica que los policías Bursztyn y Mena liberaban las zonas para los robos de autos, fábricas y viviendas marcadas; Bertoni
marcaba potenciales víctimas y ayudaba con los vehículos robados mellizos haciendo pasar choques de los autos de los integrantes por otro siniestro. La mano de obra, logística, teléfonos y armas de fuego las aportaban Ronco, Yalet, Manes, Barroso Luna, Vega y Fernández. En tanto, el ex barra Herrera y Petrullo -siempre según el expediente judicial- eran los
nexos ante la Justicia.
El hecho que disparó la pesquisa, se sabe, fue la disputa por un robo registrada el 1° de diciembre de 2010 en un departamento de La Loma, donde Juan Farías (uno de los integrantes del grupo) fue acribillado de tres balazos. Casi ocho años después cayó preso por aquel crimen Bursztyn y, a otros sujetos investigados y allanados, les reprocharon la tenencia de armas sin la debida autorización.
También se descubrió, según Lacki, la existencia de una asociación ilícita dedicada a la comisión de delitos de distinta naturaleza, con brazo ejecutor policial y amparo judicial. Uno de los sospechosos de integrar la banda, Javier Ronco, cayó detenido por un doble asesinato y trajo a la causa al ex camarista de Casación, Martín Ordoqui, destituido y detenido ayer en Gonnet, ante quien gestionó un beneficio morigeratorio a cambio de dinero, todo gracias a las gestiones que habría emprendido su conocido “Quique” Petrullo.
El juicio está a cargo del Tribunal II, integrado por los magistrados Silvia Hoerr, Santiago Paolini y Andrés Vitali. Junto a los fiscales actúan Damián Barbosa y Sebastián Bouvet en representación de la familia de Farías, mientras que las defensas están en manos de Bruno Strassera (Petrullo); Christian Romano y Juan Pesquera (Melazo); César Albarracín(Ronco); Marcelo Peña (Bursztyn), Adrián Mazzocchini y Laura Corporaal (Mena y Manes) junto a las defensoras oficiales Victoria Palomino (Barroso); Ana Julia Cova (Bertoni) y Cecilia Porcel de Peralta (Fernández).
Ayer Melazo habló y desacreditó la acusación; refirió que tenía una relación muy cercana con la fiscal que lo llevó a prisión; dijo no conocer a los otros imputados y hasta pidió cumplir detención en el estudio jurídico de sus abogados, para poder trabajar con ellos en la defensa e intervenir en el debate de manera remota, aunque los jueces no le hicieron lugar.
Ronco y Yalet formularon un acuerdo de juicio abreviado, de las mismas características de Herrera, y ahora esperan del sorteo de un juez para su convalidación.