En las últimas horas, una grave denuncia sacudió la tensa calma que se vivía en la emblemática Unidad Penal N° 1 de Olmos, donde un interno alojado en un pabellón del quinto piso dijo haber sido abusado con una zanahoria.
De inmediato, en el establecimiento carcelario ubicado en la avenida 52 y 197 se activó un protocolo de emergencia.
Todo sucedió al comienzo de este fin de semana largo, cuando la víctima le contó a las autoridades que lo durmieron con alguna sustancia y lo filmaron cuando le introducían la hortaliza en sus partes íntimas.
En principio, como sufría de hemorroides, sospechó que sus deposiciones con sangre tenían relación con esa patología.
Sin embargo, todo cambió radicalmente cuando circuló un video entre los ocupantes de las distintas celdas, todos con acceso a celulares y otras plataformas digitales.
Es que el reo, que está a cargo del Juzgado de Ejecución Penal N° 1 de La Plata, vio esas crudas imágenes y se reconoció por los tatuajes de su espalda. También las voces de quienes lo rodeaban.
Fuentes penitenciarias comentaron al respecto que "ahora el interno que sufrió el abuso sexual fue trasladado a la Unidad Nº 60 y los acusados derivados a otros sectores de la Unidad 1".
"Los teléfonos fueron secuestrados y los acusados quedaron aislados, incomunicados y sin acceso a ningún tipo de beneficio", agregaron.
Por último, en el hecho, por "abuso sexual agravado", tomó intervención la fiscalía penal en turno de nuestra ciudad, que dispondría la realización de distintos peritajes sobre los equipos móviles para analizar videos, fotos y mensajes y así desentrañar quiénes habrían estado detrás del aberrante ataque y los por qué.
