El policía Juan Alberto García Tonzo, acusado de enfrentarse a tiros con delincuentes y matar a Bastian Escalante en la localidad bonaerense de Wilde, será juzgado por un tribunal popular, a partir del 22 de septiembre. Lo acusan de "tentativa de homicidio con arma de fuego en contexto de exceso de legítima defensa, concursando idealmente con homicidio cometido con arma de fuego, con dolo eventual, en carácter de autor, en el Tribunal Oral en lo Criminal N° 2 de Avellaneda". Están previstas dos audiencias de debate.
El fiscal Juan Ignacio Colazo, de la UFI del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil N° 2, acreditó en su pedido de juicio que “el 10 de julio del 2024 por la noche, en inmediaciones de las intersecciones de las calles Caxaraville y Friuli, en Wilde, al menos cuatro delincuentes, todos menores, abordaron al policía para robarle su moto”.
Al no lograrlo, Tonzo repelió la agresión y comenzó a efectuar disparos con su arma reglamentaria excediéndose en su legítima defensa, ya que la agresión “había finalizado con la huida de los imputados, pero, no obstante, el efectivo continuó efectuando disparos en dirección a donde escapaban los ladrones”.
Ese accionar representó un daño para terceras personas, en este caso Bastian, de 10 años, quien fue alcanzado por uno de los tiros cuando salía del club con su mamá y andaba en bicicleta. Las cámaras de seguridad registraron el momento del intento de robo, el accionar de Tonzo y cuando el pequeño se cayó tras recibir el disparo. A su vez, las pericias balísticas halladas en el lugar determinaron que todas las vainas pertenecen al arma del policía.
También, los indicios de autoría y responsabilidad surgen de los videos aportados por testigos, la propia admisión que hace el delincuente detenido T.U.F en el intento de robo y, por último, de haberse hallado en el lugar del hecho la moto que utilizaron éste y su compinche, I.O.F, así como una zapatilla tirada.
Los delincuentes, todos menores que se encuentran detenidos, serán juzgados por pertenecer a una banda que realizaba robos en la zona. I. O. F. y T. U. F. tienen 16 años; mientras que otros dos, identificados como L. D. N. y M. A. M., tienen 14 y 17 años, respectivamente.
A un año del crimen de Bastian, Johana, su madre, reconoció que “no están siendo unos días muy fáciles”.
“A mi hijo lo recuerdo de todas las formas posibles, sobre todo por su sonrisa que me impulsa a seguir para levantarme y seguir hasta el final con todo el juicio”, manifestó, agregando que "seguimos con el mismo dolor y seguramente lo vamos a llevar siempre porque el policía que mató a Bastian nos arrebató lo más preciado”, añadió.
