En una recorrida por el barrio platense de La Loma, un gran grupo de vecinos contó sus vivencias y pidió, especialmente, mayor seguridad, ya que se les agotó todos los recursos posibles para poder estar seguros.
Alarmas, rejas, alambres de púa, perros y puertas blindadas. Ya no hay nada que frene al delito en esa zona de la Ciudad.
Rubén, uno de los frenstitas, aseguró: “No se ve pasar a la Policía. A mi me robaron, me tiraron un tiro, me han hecho de todo. Estoy podrido. A partir de las seis de la tarde, es tierra de nadie. Cuando a mi me robaron me dijeron que había quedado loco, asustado y yo se lo dije al comisario, ´Yo puse reja... el que la pasa para el lado de mi casa, no cuenta el cuento, seguro que lo van a sacar con los pies para delante´”.
Marcela, es otra de las vecinas que se expresaron: “Bajaron el 11 de septiembre en mi casa, saltó uno y otros dos estaban en la medianera, y uno está muy expuesto y asustado. Hace dos noches que no dormimos, porque ya intentaron entrar anoche. Subieron al techo de otra casa, abrieron la ventana y los vieron y saltaron. Yo estaba lavando los platos, miro para mi patio y veo que salta. Otros dos estaban ocultos, mirando para mi casa, señalando otras casas vecinas. Empecé a los gritos”.
A ese relato, se sumó la palabra de Silvia: “Es terrible como estamos, vivimos encarcelados. Era una zona tranquila. Hay pocos patrulleros que pasan. En general estamos con mucho miedo, mucho temor”.
De esta forma todos coincidieron en pedir mayor patrullaje ante la ola de hechos delictivos.
Hace una semana que el barrio está atravesado por la inseguridad. Si bien es el drama de siempre, en estos últimos días hubo una impresionante cantidad de robos. Algunos de ellos, con botines millonarios.