Un hombre fue condenado a 10 años de cárcel por "abuso sexual gravemente ultrajante por las circunstancias de su realización en concurso ideal con abuso sexual con acceso carnal”, por hechos ocurridos en 2016, informaron fuentes judiciales.
Según concluyó el Tribunal Oral en lo Criminal 3 de La Plata, el ahora condenado se aprovechó de la condición de su hija de 19 años, con síndrome de Down, para “manosear y lamer sus partes íntimas, obligarla a que le practicara sexo oral y someterla vía vaginal”.
El caso provocó una enorme conmoción por sus particularidades y también presentó dificultades para el desarrollo de la etapa de investigación, ya que la víctima, por razones obvias, no podía expresarse en Cámara Gesell.
“Decía palabras cortas y hacía dibujos”, fue el comentario de un vocero del caso.
La ex médica de Policía que había constatado los abusos no pudo ser localizada para este debate, por lo cual resultaron determinantes las declaraciones de la madre, su media hermana y, esencialmente, la perito Silva Acevedo. También se tomaron en cuenta los referidos dibujos, que reflejaban claras connotaciones sexuales, agregaron las fuentes consultadas.
Teniendo en cuenta que en su voto el juez Ernesto Domenech habló del derecho de los discapacitados por declarar mediante otras clases de lenguajes y del deber de los operadores judiciales de atender a estas necesidades, el fallo se destaca por su perspectiva de género y respeto de la discapacidad.
La fiscal de juicio, Helena de la Cruz, había pedido para el acusado una condena de 15 años de cárcel. La defensa estuvo a cargo de María Vigorelli, mientras que completaron el tribunal Santiago Paolini y Andrés Vitali.
Se supo que el imputado negó la autoría del hecho y deslizó la posibilidad de que haya sido otro el agresor, aunque la coartada no tuvo favorable recepción.