La de los asaltos a quinteros ya podría rankear como modalidad delictiva en La Plata, con un larguísimo registro de antecedentes y hasta un patrón en el que abundan la violencia, el actuar de noche y botines que incluyen fuertes sumas en efectivo. Con similar modus operandi se desenvolvió -en los primeros minutos del sábado- un brutal atraco en 409 y 236, en El Peligro, solo que este caso tuvo la particularidad de que los tres delincuentes llegaron al lugar a caballo, en medio de la tormenta de Santa Rosa, encapuchados y con armas, confirmaron fuentes oficiales.
El predio está a unos 5 kilómetros tierra adentro, ingresando desde la ruta 2. Por las últimas lluvias del fin de semana, sobre la calle 409, existían entonces varios tramos esa arteria estaba intransitable con cualquier tipo de vehículo, salvo una 4 x 4. Eso, por la cantidad de barro profundo, cubierto con agua en su superficie.
Según trascendió, poco después de la medianoche del sábado una pareja miraba televisión en su cama, mientras sus hijos -dos nenes de 6 y 10 años y una menor de 9-, descansaban. El matrimonio se sobresaltó al escuchar el galope cercano de un caballo. Al asomarse para ver qué pasaba, vieron a tres sujetos intentando entrar en la casa, hasta que uno abrió la puerta de entrada de una patada. Enseguida sobrevino lo peor: sus cómplices entraron a los gritos.
El primer blanco de la banda fue el dueño de casa, a quien dos de los delincuentes tumbaron al piso aplicándole la picana. Después comenzaron a pegarle brutalmente, inclusive culatazos en la cabeza con un revólver. Terminaron la faena sujetándole las manos con un alambre. Así las cosas, encararon a la esposa y la encañonaron mientras le exigían que les diera la plata si no quería que mataran a su marido. El hombre se limitó a decirle: "Dales todo".
"Se llevaron un millón y medio de pesos, más unos 200 dólares que el marido tenía en su billetera” y, como exigían más efectivo que claramente no había, terminaron por conformarse con los celulares del matrimonio, una tarjeta de Asignación Universal por Hijo, una mochila del nene más chico de la pareja, una bicicleta de rodado 29 y un
acolchado de dos plazas, detallaron voceros oficiales.
El calvario duró unos 20 minutos. Pasado ese tiempo, la banda emprendió la fuga “con los caballos por el campo, a la altura de la calle 236 y en dirección a la calle 404”. La cosa no terminó ahí. Dejaron a las víctimas encerradas y se llevaron la llave. Por suerte la pareja tenía otra copia y los fue a auxiliar un vecino.
Intervienen el Destacamento Policial El Peligro y la Fiscalía de Autores Ignorados Nº 9 de La Plata.
