En una operación que bautizaron "secta anónima", la Policía Federal Argentina realizó 50 allanamientos y detuvo a 24 personas, desarticulando así una organización trasnacional que operaba en el país y en Estados Unidos, se informó. Además, se giraron a Interpol pedidos de captura internacional de miembros de la banda.
Según el reporte oficial, el grupo se mueve ·en el mundo de la empresa, salud y política, siendo sus organizadores derivados de lo que antiguamente eran las llamadas sectas, que hoy han evolucionado adoptando multiplicidad de formas".
"Las sectas mutaron con el tiempo, adoptando su discurso a cada contexto histórico. Las formas que tenían hace 30 o 40 años hoy son otras", dijo un investigador.
Aunque la banda tiene base en Argentina, cuenta también con sedes en distintos estados de los Estados Unidos.
De acuerdo con la información que se pudo reunir en la investigación, bajo el discurso de una filosofía que pregonaría terminar con “los males del SIDA y las drogas” para “buscar el desarrollo de la felicidad”, la banda se dedicaría a captar personas para, en algunos casos, incorporarlos a la organización y reducirlos a una situación de servidumbre.
"En otros casos ofrecían algunos de los tratamientos 'médicos' que hacen en sus 'clínicas', con el propósito fundamental en uno y otro caso de obtener dinero, influencias y/o “coberturas” para sus líderes", detalló la misma fuente.
En la actualidad, la organización utiliza a sus adeptas para el ofrecimiento de relaciones sexuales a “personas de poder”, que además se dedicarían a realizar “curas de sueño” consistentes en “empastillar” a los “fieles” de la organización y a otras personas captadas en el extranjero para dormirlos durante días como una forma de castigo para los primeros y un supuesto tratamiento contra las drogas para los segundos.
Por último, siempre de acuerdo a lo que figura en la causa, "las ganancias obtenidas de la explotación de todas estas personas ingresarían al circuito legal mediante inmobiliarias y una escribanía que tiene la organización en nuestro país y distintas fundaciones creadas en los Estados Unidos, generando un flujo constante de divisas extranjeras".
Dicha organización tiene una estructura interna para “evolucionar” hasta poder “reencarnar”: su lider, Nivel 7 (“Maestro” o “El ángel”); sus secundantes, Nivel 6, (“Apóstoles”) y luego Nivel 5 (“Genios”), Nivel 4 (“Alumnos”) y Niveles 3, 2, 1 (“Humanos comunes”).
Se estableció un flujo de viajes hacia los Estados Unidos de América y Uruguay, con las finalidades de realizar las mismas actividades que hacen en Argentina, pero con la diferencia que las personas captadas en el extranjero son convencidas de venir al país para realizar distintos tratamientos de “Ayuda”, como “La cura del sueño” y con ello poder aislarlos de sus familiares directos y realizar distintas maniobras para obtener beneficios económicos.
Las “Curas del sueño” se realizan en distintos departamentos de CABA, que identifican como “Clínicas o consultorios”, estableciéndose que dichos lugares no se encuentran registrados, ni habilitados a tal fin; realizando el tratamiento con distintos medicamentos somníferos para lograr el control total de la persona, se informó oficialmente.
Por escuchas telefónicas se pudo establecer que, "a fin de afianzar dicha actividad en el país del norte, tiene en planes de corto plazo comprar un edificio por un valor aproximado a U$S 1.500.000. Que dicha suma saldría de un “Banquito” que poseen en dicho país, es decir que manejan dinero en efectivo de origen dudoso, el cual utilizarían para “blaquear” en compras inmobiliarias y cosas muebles".
También se los acusa de usar a sus alumnas para que capten hombres de gran poder adquisitivo o con influencias a través de sexo, para hacer negocios o actividades de blanqueo de dinero. "Uno de los lugares donde operan para la mencionada captación son los bares y lobbys de hoteles", se explicó.
Se estima que la cantidad de “Alumnos de la familia BAYF” ascendería a 170 personas aproximadamente en Argentina y otros tantos en Estados Unidos, que aportan a dicha organización una cuota mensual en divisas extranjeras, que llaman "ceremonial".
A los acusados se les imputan los delitos de trata de personas con fines de reducción a la servidumbre, agravado por coerción; hurto agravado; lavado de activos; asociación ilícita, ejercicio ilegal de la medicina; expendio Irregular de medicamentos y tráfico de influencias.
La Federal contó con el apoyo y colaboración del Bureau of Diplomatic Security de la embajada de Estados Unidos. En los allanamientos se secuestró más de un millón de dólares, casi dos millones de pesos, mil libras esterlinas, 100 euros, 30 medallas de plata, juguetes sexuales, videos pornográficos, títulos de propiedad e historias clínicas, entre otras cosas
