Criminales se metieron en la casa de un hombre de 84 años, convencidos de que debía guardar allí un montón de "billetes verdes". Resueltos a encontrarlos, no sólo lo ataron y amenazaron con armas, también le aplicaron varios golpes por los que la víctima tuvo que recibir asistencia. ¿Qué se llevaron? la plata de la jubilación, acolchados y un medidor de glucemia, confirmaron fuentes de la Policía.
Sucedió el martes 12 de septiembre en una vivienda situada en 515 entre 6 y 7, en la localidad platense de Ringuelet, la misma zona donde hace pocos días una banda castigó violentamente a una jubilada y le baleó el perro en una entradera brutal.
En este nuevo caso, los intrusos se colaron en la propiedad a las 4.30 de la mañana, cuando su dueño estaba durmiendo. Por lo que se pudo reconstruir, lo hicieron por los techos. Luego violentaron una ventana y finalmente doblaron una reja.
Con el rostro cubierto, los desaprensivos sujetos despertaron a la víctima y, casi sin mediar palabra comenzaron a agredirla mientras le exigían que revelara el lugar en el que, según suponían, tenía guardados sus ahorros.
Tal fue el nivel de crueldad con el que procedieron, que el dueño de casa terminó siendo atendido por personal del SAME, a raíz de los golpes que le propinaron en varias partes
del cuerpo y de las heridas que le causaron en la cabeza con los culatazos.
El calvario para este hombre duró una hora, en la que tuvo que soportar los castigos, amenazas y ver cómo destrozaban y daban vuelta su casa. Por fin, los ladrones huyeron con un televisor, una
radio, $55.000 correspondientes a la jubilación, un medidor de glucemia, acolchados y algunas camperas.
