Es intensamente buscado el joven acusado de matar a cuchilladas a la ex pareja de su mujer, en circunstancias que se investigan. Por lo pronto, familiares de la chica vinculan a la víctimas con "reiterados episodios de violencia doméstica", por los que le habían interpuesto una orden de restricción.
Lo que se sabe hasta el momento es que todo se desencadenó el lunes a la noche en 5 bis entre 82 y 83, donde se presentó Juan Pablo Garraza (29) con la intención de ver a sus hijas. Algo sucedió, la ex pareja le salió al cruce y todo terminó de la peor forma.
Gerardo, padre de la joven, dijo que Garraza ya había estado preso antes de describirlo como "conflictivo" y acosador, tanto, que tenía una restricción perimetral y estaban en tratativas por ampliarla.
“Mi hija tuvo muchos problemas con él y le tenía miedo. Si bien no quería que las nenas dejaran de ver al padre, venía a cualquiera hora, a las once de la noche, a las dos de la mañana y siempre pasaba algo”, relató, agregando que en cierta ocasión "lo tuve que frenar y me amenazó”.
Desde ese mismo entorno aseguran que el acusado del crimen -la actual pareja de la joven- “es un tipo buenísimo, muy tranquilo”. Tampoco saben quién portaba el cuchillo. Si lo llevaba Garraza y se lo sacaron o si, quien le dio muerte, lo tenía encima para defenderse por los dramas que presuntamente ocurrían siempre.
Lo cierto es que Garraza recibió un puntazo en el pecho y cayó muerto en la entrada de la vivienda de su expareja. En medio de un griterío ensordecedor y, los intentos en vano por ayudar al herido, el homicida escapó.
“Le pedimos que se entregue. Él está muy asustado, pero se tiene que hacer cargo. Nadie justifica lo que hizo, aunque estamos convencidos de que algo pasó”, expresó el tío de la mujer, aportando que "fue todo muy rápido. Él vino a molestar a la casa de mi sobrina. Y no sé qué habrá dicho”.
Los investigadores estiman que el imputado "caerá en cualquier momento" porque "ya está identificado y se sabe no cuenta con recursos para mantenerse prófugo".
Allegados al fallecido lo describieron, por su lado, como "muy buena persona. Todos lo queríamos acá en la zona. Él estaba separado de su mujer. Estaba bastante solo”. Revelaron también que le decían "Rambo" y trabajaba como albañil.
“Era muy laburador. Tenía un conflicto con la pareja de su exmujer, que siempre discutían y el chabón le decía que lo iba a matar. Hasta que lo mató”, agregaron desde Altos de San Lorenzo, el lugar donde residía.
Instruye la causa el fiscal Juan Mennucci.
