Es intensa la búsqueda de los ladrones que este fin de semana se metieron en un negocio de Villa Elisa, abriendo un boquete en la pared. El golpe les resultó bien: se llevaron un fajo con 15 mil dólares, confirmaron los damnificados en su denuncia. Fuentes oficiales explicaron que la situación fue descubierta por el dueño del inmueble quien, en una recorrida, advirtió que había un hueco en la pared.
De inmediato le avisó al comerciante que se lo alquila y al cabo de unas horas se confirmó la peor de las sospechas: le habían reventado la caja fuerte y habían extraído los dólares correspondientes a un reciente negocio.
Sucedió en una agencia de viajes en 419 entre 18 y 21A, cuyo propietario jamás imaginó que terminaría siendo víctima de un robo planificado al detalle, como los que se cuentan en las películas. Quizás por ello tuvo la seguridad de dejar sus ahorros allí.
Los investigadores no dudan de que se trató de un golpe fríamente calculado. Así se desprende de los pasos que fue ejecutando la banda para acceder al local sin levantar la más mínima sospecha. Lo primero que hicieron fue interrumpir por completo el abastecimiento de energía eléctrica. El objetivo de este paso fue vaciar las baterías de las cámaras y de los sensores
de movimientos del sistema de seguridad instalado.
Todo apunta a que esta maniobra pudo haber sido llevada adelante el jueves por la noche, ya que las baterías tienen una autonomía que no pasa las 48 horas. Cumplida esta etapa, iniciaron la apertura del orificio en uno de los laterales. Sobre este aspecto también hay altos grados de certeza ya que operaron de noche.
“Nadie en la zona vio alguna situación extraña. Se ve que trabajaron con sumo sigilo y con la oscuridad como aliada”, explicaron las mismas fuentes.
Una vez que tuvieron acceso al comercio, los delincuentes comenzaron la faena para abrir una caja de fuerte que, según trascendió, contaba con doble seguro: llave y clave. Nada de esto fue un escollo para los hampones, que, con una mezcla de fuerza bruta y experticia, removieron la tapa.
Un familiar de la víctima se acercó a la escena tras el llamado de alerta del dueño. Es que, al momento del hecho, el damnificado se encontraba a miles de kilómetros de La Plata. “El dato de que el
dueño estaría de viaje es otro de los indicios que confirma que los ladrones tomaron cada decisión con información privilegiada”, destacó un investigador.
Lo concreto es que, al abrir el local para que la policía llevara adelante las diligencias, el familiar se encontró con la oficina toda revuelta, el sistema de seguridad y con la caja fuerte vacía.
Trascendió que no se llevaron ningún otro objeto de valor. Sólo se limitaron a tomar un fajo de 15 mil dólares, cuya suma en moneda nacional asciende a 6 millones de pesos, tomando el valor del dólar que se transa en el denominado mercado informal. Entonces, si, abandonaron la escena.