“Colaborá, y no te muevas, porque te pego un tiro en la cabeza...”, le dijo a Roberto uno de los tres encapuchados que se metieron en su casa de Tolosa con el dato -aseguran las víctimas- de que de allí podrían llevarse una fuerte suma en dólares. Era verdad. Escaparon con unos 300 mil dólares que los dueños de la propiedad habían obtenido de la venta de un terreno.
Roberto tiene 85 años y vive en 532 y 122, junto a una hija y su nieto de 6 años. En las últimas horas estaba en la cocina de esa casa, esperando a que se calentara el agua para tomar unos mates, cuando lo sorprendieron las voces de varios desconocidos que lo abordaron de repente, irrumpiendo por un patio trasero.
Eran tres delincuentes vestidos de negro, con barbijos que les tapaban la mitad de la cara y empuñando armas de fuego con las que redujeron al jubilado en cuestión de segundos. Sin embargo, y por las dudas, lo aturdieron de una trompada en la cara y, ya en el piso, le pusieron las manos en la espalda y lo ataron con precintos.
“Me dieron un golpe en la costilla, todavía me duele. Estuvieron como cuatro horas adentro, se
manejaron como quisieron”, contó Roberto, aportando que la banda llegó a las 8 de la mañana. A su hija también la amenazaron, pero, aclaró, "por suerte no le hicieron nada”.
Para evitar que la cosa resultara todavía peor, el hombre no se resistió a revelar dónde estaba la caja fuerte con todos los ahorros.
“El monto es aproximadamente de 300 mil dólares producto de la venta de un terreno”, expresaron fuentes cercanas al entorno familiar. Encima, los delincuentes se llevaron joyas de oro y plata, relojes de oro y un revólver calibre 36.
“Te fichan todo. Vienen con la precisa. Yo tenía oro y cosas de valor de muchos años. Se llevaron todo", admitió Roberto, agregando que hace pocas horas descubrió el robo de su auto. En otras palabras, esos mismos ladrones, u otros, volvieron por lo poco que quedaba.
"Se ve que entraron sin violentar nada porque no escuché nada”, sostuvo el jubilado. Tras los dos robos sufridos en menos de siete días, investigadores están abocados a la búsqueda de los responsables. “La sospecha está en alguien que conoce la casa y los movimientos de la familia”, indicaron testigos.
El golpe al jubilado no fue el único que convulsionó Tolosa recientemente. Una vecina de la cuadra afirmó que una seguidilla de asaltos los puso en alerta.
“En esta cuadra sufrimos siete robos en menos de un mes”. “El otro día le robaron la camioneta a un vecino, aunque anteriormente le robaron la rueda y la batería. A otro le robaron la rueda del auto. Y a mi hijo le abrieron la camioneta y le sacaron lo que tenía adentro. A otro vecino le robaron los focos de la luz y a una vecina le saltaron el paredón hace tres días”, detalló.
