A los piedrazos, una banda de pibes atacó tres negocios de Gonnet para romper los vidrios, entrar y robar lo que estuviera a mano, aunque fue peor el daño que causaron que el monto total que se llevaron. Ocurrió el domingo por la noche a metros de la comisaría, con una modalidad casi idéntica a la desplegada días atrás en otros tres locales de Villa Castells.
Según contaron en el lugar, una carnicería, una panadería y una fiambrería que funcionan en 14 y 502 habrían sido atacados cerca de las 23.15 bajo la modalidad de “tira-piedras”. Lucas, una de las víctimas del hecho, reconoció que pasaron "una noche difícil. Gracias a que los vecinos que advirtieron el sonido, prendieron a las alarmas, los delincuentes se dieron a la fuga”.
“Estos pibes si entran por un lado, salen por el otro. Este país está hecho al revés: para ellos (los delincuentes) y no para nosotros”, aportó Lucas, indignado e impotente frente al panorama general.
Juan, propietario de la panadería, manifestó su preocupación ante el ataque: “Me llamó el chico de la fiambrería. Se llevaron solamente el cambio, que eran alrededor de 600 pesos, pero me rompieron el vidrio de la entrada con una piedra”.
“¿Cuál es el limite? ¿Hasta dónde llegamos?. Es una locura que a una cuadra de la comisaría pase esto. Entran en tres comercios así como si nada. Nosotros en la puerta tenemos un ploteo que no permite ver para adentro. Vinieron a buscar plata”, aseguró, agregando que cuando él llegó "estaban los policías. Pero después nos quedamos con el chico de la fiambrería y no pasó ni un patrullero. Los vecinos nos ayudaban y nos preguntaban si necesitábamos algo. Hoy estamos planteando como solucionar el tema de los blíndex. Esperemos que al menos pongan efectivos policiales en la zona”.
¿LA MISMA BANDA?
Hace pocos días se vivió una situación parecida en tres comercios de 10 y 501, zona de Villa Castells que ya viene siendo castigada por el delito y en donde ahora los propietarios de varios locales que, además de tener que asumir las mermas por el robo de mercadería o el dinero de la caja, si es que alcanzaron a sacarle algo, deben costear importantes gastos para reparar los daños, ya que no siempre tienen seguro.
En principio, todo apunta a que se trata de una banda de menores que usa el mismo método que desplegado en Gonnet: arrojar una piedra, una baldosa o un trozo de escombro contra una vidriera, para luego ingresar en el local y apoderarse de todo cuanto puedan cargar. Lo que no está claro es si se trata del mismo grupo.
Según trascendió, el ataque en Villa Castells se produjo durante la madrugada y los cristales de la puerta se rompieron en cientos de pedazos. Tras ese primer acto de vandalismo, los sospechosos ingresaron en los comercios y, en uno de los casos, se apoderaron de varias herramientas de una barbería. Una fiambrería y una carnicería de la misma cuadra completaron el peor de los escenarios.
Si bien en estos dos locales no alcanzaron a robar, los daños materiales que provocaron en los blíndex, como se dijo, pusieron en serios gastos a sus propietarios. En ambos negocios calcularon que el arreglo de los vidrios asciende a una suma cercana a los 140 mil pesos.
