Marcelo Romero fue designado para intervenir como fiscal en el juicio oral al actual intendente de Ensenada, Mario Secco, por los violentos sucesos ocurridos en diciembre de 2017 en la Legislatura bonaerense, donde tuvieron que suspender una sesión en la Cámara de Diputados cuando trataba la reforma a la ley de ministerios, la prórroga de la emergencia en seguridad y la obligatoriedad de presentar declaraciones juradas para los legisladores.
En las afueras del edificio legislativo, mientras los diputados intentaban debatir en medio de fuertes cruces y gritos, comenzaron los disturbios. Casi una réplica de lo que sucedía en Buenos Aires.
Militantes de sindicatos y movimientos sociales se habían acercado para manifestarse en contra de los proyectos y fueron corridos por la Policía con gases lacrimógenos y balas de goma. Entonces, la situación también se enrareció en la puerta de la Cámara baja provincial.
Cuando los incidentes llegaron a su punto cúlmine, Secco ingresó en el recinto a la fuerza junto a un grupo de allegados a La Cámpora y pidió la suspensión de la sesión. El jefe comunal, incluso, tiró sobre el escritorio del presidente cartuchos y piedras. Luego, a los gritos, pidió que el debate no continúe.
Los cargos por ese hecho, en una instrucción que corrió por cuenta de los fiscales Ana Medina y Juan Cruz Condomí Alcorta, son por "resistencia a la autoridad, coacción agravada y perturbación del ejercicio de los poderes públicos".
El debate aún no tiene fecha, pero, según voceros de tribunales, debería realizarse en 2022 ante el Tribunal Oral en lo Criminal II de La Plata.