Con gran dolor, la familia de Thiago Vera (4), sus amigos y allegados, salieron a reclamar justicia. Concretamente, quieren ver preso a quien consideran responsable del accidente de tránsito ocurrido hace una semana en Punta Lara, a raíz del cual el chiquito, que es autista, sufrió heridas irreversibles, tanto que no podrá volver a caminar.
El domingo pasado, Thiago iba en el auto (VW Bora) con sus padres cuando, al parecer, otro rodado realizó una maniobra temeraria en cercanía de la laguna Los Patos, sobre Diagonal 74, que provocó una colisión.
El impacto fue muy fuerte y se accionaron los airbags del coche de la familia Vera, que golpearon sobre el cuerpo del chiquito. Él quedó inconsciente.
Según explicó Rodrigo Vera, por su condición psicológica, Thiago siempre buscaba estar en los brazos de quienes consideraba sus seres más cercanos. Iba dormido.
"Se vino en contramano. No pude evitarlo", expresó el papá -Rodrigo Vera-, destruído. "Nos arruinaron la vida", agregó al borde de las lágrimas.
Es que Thiago fue llevado a dos hospitales y en el último, el de Niños, tuvieron que someterlo a una intervención quirúrgica, que demandó más de 5 horas. Tenía rota la columna vertebral.
Por esa razón, pese al esfuerzo médico, quedó cuadripléjico.
El nene sigue internado, grave, y por eso se organizó una marcha para exigir a la Justicia que tome en consideración las consecuencias del siniestro.
El imputado, identificado como Hugo Javier Gabrielloni, presuntamente conducía bajo los efectos del alcohol, de acuerdo a los testimonios de la familia Vera.
Su Ford Falcon quedó cruzado en la calle y fue embestido al medio. Se presume que realizó un avance antirreglamentario, aunque eso será dirimido por los peritajes, que ya ordenó la fiscalía de Delitos Culposos que estaba en turno aquel día triste.
La causa es por "lesiones culposas", aunque los familiares de Thiago exigen un cambio de calificación legal.
Del lugar del accidente, Gabrielloni tuvo que ser sacado por la Policía, porque sufrió un intento de linchamiento. Los ánimos contra su persona se mostraban crispados.
Se supo que ya pidió una eximición de prisión, aunque no fue tratada, porque, al menos por ahora, no existe un pedido de detención en su contra.
También solicitó medidas de seguridad, ante la ola de escraches de las que vendría siendo objeto. En redes sociales y por teléfono.
